Ahora

Entre versos de Hikmet encontré historias de antaño

Encontré un reloj de arena que supo marcarme el camino, que me dió el tiempo suficiente para emprender otros viajes.

Entre campos de arroz saboreé bellas arrugas que habian dejado el tiempo y la felicidad, descubrí lo precioso del instante y de la risa fugaz.

Con las palabras de Galeano soñé mundos lejanos.

Caminé y decidí volver a volar, conocer más y viajar y sentir de nuevo palabras entre mis dedos, como antes , como siempre.

Puedo

Puedo escribir los versos mas tristes esta noche.

Puedo soñar aquellas largas tardes de Otoño o quizás la melancolía de las calles de París.

Puedo cerrar los ojos y recordar el principio, las sonrisas de manzana y el agua.

Sin tener que descansar, sin poder volver, como en aquel cuadro de Monet.

Sabiéndome cariñoso y sencillo , acogedor y comprensivo.

Observando las estrellas, cogiendo la noche y esperando paciente la llegada de un viajero.

Mis Sueños

El otro día mis sueños se ataron los cordones de los zapatos y decidieron volar en el metro, decidieron, como yo decidí hace tiempo, que era hora de cambiar de alas y probar nuevas delicias de chocolate.
Los sueños, revoltosos y traviesos se colaron entre las manos de aquella chica que se sentaba delante mío sin que se diera cuenta, jugaron con su hermoso pelo de invierno y de reojo pasearon por su falda.
Compraron flores en el retiro y suspiraron al ver pasar a aquella pareja, jugaron al parchís con guiños de cuentos y vieron como los almendros, al fin, florecían.
Se posaron en los versos de Hikmet para cansados, al final del dia, dormir juntos.

Me voy

Me voy, me voy caminando de puntillas, sin hacer ruido, despacio y tratando de que ningún pedazo de madera cruja tras mis pisadas, me voy casi como vine, con mis botas, los calcetines a rayas y la maleta de las grandes ocasiones.
Me voy después de contarte lo divino y lo humano y de compartir al fin un plato de espaguetis, me voy después de dejar cosas bien hechas, y otras no tanto.
Me voy después de escuchar los ronquidos de la luna, degustar tostadas de versos y ver como también nieva en verano.
Después de soñar playas con caracolas y reír hasta el final, después de todo, después de volver, después de encontrarte, después de todo me voy… y te llevo conmigo.